El taxista Ramiro Padilla fue asesinado dentro de su vehículo por dos sujetos que minutos antes habían abordado el automóvil y solicitado una carrera hacia el sector de Nueva Luz, en el corregimiento de Burunga, distrito de Arraiján, provincia de Panamá Oeste.
Al intentar defenderse, el taxista recibió un disparo de arma de fuego en la cabeza, tras lo cual el vehículo se sale de la vía y cae en una hondonada.
El capitán de la Policía Nacional (PN), Everardo De León, informó que en el sitio las unidades policiales ubicaron fuera del taxi a los dos delincuentes y un arma de fuego calibre 9 milímetros.
Dentro del vehículo se mantenía el conductor, quien al ser atendido por paramédicos del Sistema Único de Manejo de Emergencias (SUME) 911, no presentaba signos vitales.
Para efectuar las tareas de levantamiento del cadáver fue necesaria una grúa, la cual extrajo de la hondonada el taxi con matrícula 13T- 00998. En el parabrisas delantero se podían apreciar rastros de sangre.
Próximo al sitio del homicidio se encuentra una cámara del centro de operaciones de videovigilancia, pero la misma está fuera de operación.
Los dos hombres aprehendidos por este homicidio mantienen prontuarios policiales. Uno de ellos fue implicado en un allanamiento y el otro por el decomiso de un arma de fuego.
Dirigentes taxistas, quienes se presentaron al sitio lamentaron la muerte de Padilla, un veterano trabajador del volante, además de solicitar a la PN mayor vigilancia en todo Arraiján.