Este 2023, se cumplen 10 años desde que se televisó por primera vez Las lluvias de Castamere, mejor conocido como La boda roja. Fue el inolvidable episodio 9 de la tercera temporada de Game of Thrones lo que dejó marcado a todo aquel que era fan de la serie de HBO Max. Desde la muerte de Ned Stark (Sean Bean) tras ser declarado como traidor por Cersei Lannister (Lena Headey) no se había visto algo tan impactante.
Luego de mirar la muerte de Robb Stark (Richard Madden), su esposa embarazada y su madre Catelyn Stark (Michelle Fairley), todo el fandom del éxito televisivo creyó que no iba a superar jamás esa tragedia, y vaya que hay quienes no lo han hecho. Una década más tarde, ni siquiera el protagonista de dicho episodio se ha librado del peso del personaje y su decadencia como el Rey del Norte, a pesar de que HBO ya lo dejó atrás y hasta lanzó la precuela La casa del dragón.
El actor británico fue uno de los invitados al programa Jimmy Kimmel Live! y el conductor no desaprovechó la oportunidad de preguntarle cómo le iba en las bodas luego de dicha experiencia tan traumática. Él respondió que ya no lo invitan a ninguna boda, pues nadie desea que la mala suerte les llegue a un evento tan importante en sus vidas.
También comentó que ojalá en la adaptación de George R.R. Martin mejor lo hubieran asesinado en una fiesta infantil y no en una boda, pues preferiría prescindir de esos eventos y no de uno tan divertido como lo es el festejo de un matrimonio. El intérprete reafirmó que era verdad que ya no lo invitan a dichas celebraciones, pero no se le hace algo tan malo.
