En el año 2000, se casó con el príncipe Maximiliano de Liechtenstein, de una de las monarquías más ricas y discretas de Europa.
Se puede decir que Ángela Brown es la primera mujer afrodescendiente que se convirtió en princesa al casarse con el príncipe Maximiliano.
La royal nació en el año 1968 en Panamá. Su padre era un empresario, Javier Francisco Brown y él, junto a su hija y su mujer, Silvia Maritza Burke, se mudaron a Nueva York cuando Ángela era muy chica. Allí, completó su educación secundaria e ingresó en la prestigiosa Parson's School of Design: su sueño era ser diseñadora de moda.
Lejos de las cámaras, de las luces y del ojo público, Ángela lleva una vida normal y bastante discreta junto a su esposo y su hijo, Alfons Constantino: "Hace una vida normal y discreta", le dijo a Hola una fuente cercana a la panameña.
Brown vive con su familia entre Londres y Vaduz por el trabajo del príncipe Maximiliano. La fuente destacó que ambos son personas muy sencillas, para nada ostentosas. "No la vas a ver en fiestas, dando entrevistas a los medios o en los sitios de moda... En la filosofía de ellos es no llamar la atención", dijo la fuente a la publicación.